¿Estoy usando demasiado o demasiado poco?
Somos conscientes de que dar con la dosis correcta de detergente no es cosa fácil. Con demasiada frecuencia nos damos cuenta de que la ropa no ha quedado tan limpia como quisiéramos, no huele lo suficientemente bien o ha quedado áspera. Hay muchos factores que influyen en el resultado del lavado. Algunos no dependen de nosotros, como la dureza del agua, ¡pero hay otros que sí que están en nuestras manos! Uno de los problemas más comunes, que además puede dañar las prendas a largo plazo, es el uso de demasiado detergente. No es necesario aplicar más detergente del recomendado para obtener mejores resultados. Hoy te vamos a explicar cómo dosificar correctamente el detergente, pero antes veamos los diferentes tipos que hay en el mercado y sus distintos usos.
Detergente en polvo
El detergente en polvo es más adecuado para lavar ropa blanca, ya que contiene blanqueadores químicos. Los polvos deben colocarse en el cajón del detergente, y nosotros sugerimos utilizar un medidor e introducir la cantidad indicada en el paquete. El detergente en polvo lava bien incluso a bajas temperaturas, el único problema que puedes encontrar con él es que, al ser poco soluble, pueden quedar restos en la ropa. En este caso, haz un aclarado adicional.
Detergente liquido
A diferencia del detergente en polvo, el detergente líquido es más soluble y no deja rastro en la ropa. Se utiliza principalmente en prendas delicadas y de color. Tiene menos poder de limpieza que el detergente en polvo, por lo que es necesario utilizar una mayor cantidad. En su caso también te sugerimos que uses un medidor y que leas las instrucciones del paquete. Una vez más, el detergente debe verterse en el cajón antes de iniciar el lavado.
Detergente en cápsulas
Por último están las soluciones en cápsulas, pastillas o monodosis, que tienen la ventaja de ser autodosificadas. El número de cápsulas a utilizar depende de la carga de ropa, por eso te recomendamos consultar siempre el paquete. Estas cápsulas solubles en agua se introducen directamente en el tambor de la lavadora, junto con la ropa. Como ya hemos dicho, la ventaja que presentan es que el detergente y el suavizante ya están dosificados: en promedio cuestan más que otros tipos de detergente, pero para algunas personas son mucho más cómodos, ¡así que la elección es tuya!
En Candy también hemos pensado en una solución para el problema de la dosificación del detergente. Con nuestra RapidÓ y la aplicación simply-Fi, recibirás sugerencias sobre qué ciclo usar en cada lavado y sobre la cantidad requerida de detergente, ¡simplemente haz una foto de las prendas que quieras lavar con tu smartphone! Además, con la función Inventario de detergente, ¡ya nunca volverás a quedarte sin él! La aplicación realizará un seguimiento del consumo y podrá hacer un pedido automáticamente en Amazon. Más fácil, imposible.